Casi 120 millones de dólares es la cantidad que Coca-cola ha pagado a científicos e instituciones dedicados al estudio de la obesidad y la nutrición.
Según el director ejecutivo Muhtar Kent "Nuestro apoyo financiero a estos reputados expertos, instituciones y organizaciones se ha hecho con la mejor de las intenciones, para apoyar a las comunidades locales y ofrecer soluciones al problema de salud pública(de obesidad) que afronta EEUU y todo el mundo".
Según el director ejecutivo Muhtar Kent "Nuestro apoyo financiero a estos reputados expertos, instituciones y organizaciones se ha hecho con la mejor de las intenciones, para apoyar a las comunidades locales y ofrecer soluciones al problema de salud pública(de obesidad) que afronta EEUU y todo el mundo".
Por el momento esta noticia afecta a sociedades científicas como en Colegio Americano de Cardiología, la Academia de Pediatría o la Asociación de Médicos de Familia, pero también a personas individualmente, como a la bloguera Ramona Braganza.
A pesar de que Coca-cola quiere transmitir una idea de transparencia muchas asociaciones critican estos vínculos ya que como señala Yoni Freedhoff "Estas organizaciones )reciben dinero) de una compañía cuyos productos son clave en la obesidad y en la expansión de enfermedades no comunicables como la diabetes"
Por otro lado muchos de estos científicos e instituciones han propagado la idea de que es la falta de ejercicio la principal causa de obesidad en el mundo, obviando las evidencias que demuestran que la dieta y e consumo de bebidas azucaradas tienen un papel más importante en la obesidad.
Una investigación española publicada en 2014 demostraba que los resultados de las investigaciones que analizan la relación de los refrescos con el aumento de peso dependían de si habían sido financiados o no por compañías del sector.
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